
En España, la infección por Diphyllobothrium latum es poco frecuente, y la mayoría de los casos están relacionados con el consumo de pescado de agua dulce crudo o poco cocinado. Las autoridades sanitarias españolas recomiendan cocinar bien o congelar el pescado para prevenir la infección. El tratamiento con praziquantel es eficaz, y los esfuerzos de prevención se centran en las normas de seguridad alimentaria.